jueves, 30 de julio de 2009

Meet the Habsburgs : " Sealed destiny"


A eso de las ocho de la tarde, Annunziata comenzo a bostezar. Fue entonces que los invitados de a poco comenzaron a dejar la casa y los despidio el orgulloso padre que, a pesar de la ocasion, tenia llena de pena la mirada. Al despedirse de su cuñada, Maria Josepha , se sintio fatal.

-Ya sabes. Si tienes noticias de Otto, me avisas. Ya?. Tanto tiempo sin saber de el.

Hirvio de ganas de contarle que el muy canalla estaba en Viena, en la misma casa con su amante, nada mas y nada menos que su propia mujer. Pero no, solo le sonrio y replico :

-Por supuesto. Pero no te preocupes que debe de estar bien.

Luego, al encontrarse solo con Ludwig, su tio Franz y Carolath, se retiro con la niña para acostarla. Le ayudo a lavarse los dientes, le puso la pijamita y la arropo.

-Ya que mamà esta aqui, cuando volveremos a casa?.

-No se amor. A lo que se sienta bien. Recuerda que esta algo cansada por su viaje.

-Ya veo. Extraño mucho mi cuarto y los columpios.

-Si quieres te instalo uno aqui.

-No, quiero volver a casa con ustedes.

Quedo mudo y luego le contesto

-Hablare con ella, a ver si apresuramos las cosas

La niña le sonrio y luego estiro los brazos para abrazarlo y besarlo. A continuacion cayo profundamente dormida. La acaricio y salio del cuarto donde se encontro con su suegro.

-Y esa cara?

-Miana quiere que volvamos a casa.

-Y que piensas hacer al respecto. Hablaras con Mimi?

-Pues...

-Muchacho. No te gastes mas. Anda, dale el divorcio y date la oportunidad de rehacer tu vida.

-Estas loco!!!. Para nada!, eso jamas!. Sophie es mia y no se la dare en bandeja a Otto.

Ludwig sintio pena por su obstinado sobrino y luego dijo:

-Esta bien, como quieras. Yo ahora saldre, creo que, con lo que esta ocurriendo alla abajo, sobro.

-Yo ire a...

Lo agarro del pecho , impidiendo que hiciese una tonteria.

-Ahora si hazme caso. No vayas, que sigue con tu hermano.

Si, tio Ludwig tenia razon. No habia motivo para seguir humillandose, al menos ese dia. Ya estaba cansado de pelear y solo queria descansar para tomar fuerzas y volver a la batalla. No dejaria ir a su Mimi tan facilmente. Espero que su tio se fuese y luego se dirigio hacia el cuarto de invitados para acostarse. Se deshizo de la levita y los zapatos, se saco el cuello y luego la corbata. A continuacion se recosto mirando los apliquès del cielo raso. Se remonto a aquella tarde de primavera de 1880 cuando ilusionado, paso a buscar a su prima para pasear a caballo. Al llegar la encontro en la entrada, pegandose levemente en la pierna con la fusta. Vestia un negro y ceñido traje de montar, tambien un simpatico sombrerito de copa. A pesar de que el dia estaba algo abochornado, al verla se le ilumino completamente.

-Te ves bellisima. Yo..

-Ya...menos blah blah y partamos que me aburro!

-Esta bien.

Les trajeron sus caballo, dos hermosos sementales arabes negro azabache y se internaron a paso lento en el bosque. Luego, para hacer mas entretenido el paseo, ambos aceleraron el paso, siendo primero Sophie la que pegase con la fusta al suyo. En la carrera, el sombrerito salio volando..

-Franz! Franz! mi sombrero!. Para , para!.

Con fuerza hizo parar su caballo y luego Franz hizo lo mismo, acercandose a ella para buscar el dichoso articulo. Ataron los caballos a un arbol y a pie comenzaron a buscarlo.

-Estas segura que es por aca?

-Si, si!. Dios santo! me encanta ese sombrero!. Si lo pierdo, muero!

Buscaron hasta que Mimi lo encontro enredado en unas ramas.

-Por fin! aqui esta!

Lo tomo y abrazo cerrando los ojos de alegria. Entonces sintio un tibio aliento en cuello, luego, una boca ansiosa besandolo y lamiendolo, tambien manos juguetonas, apretado y acariciandole el vientre.

Sophie primero se resistio tratando de escapar de su ansioso primo, el que, la apretaba fuertemente contra si tratando de subir las telas de su falda.

-Estas loco...

-Vamos, Mimi. Nadie nos vera...

La joven no podia creer lo descarado que estaba siendo el tranquilo "sonsito" el cual , despues de aquella noche, habia perdido todo atisbo de timidez y sentido comun. Por fin Sophie se deshizo de el y le quedo mirando de frente con sonrisa malevola. El pobre chico jadeaba, tenia las mejoillas rojas y las pupilas completamente dilatadas. Con el dedo, su prima le llamo y este como hierro al iman se le volvio a apegar besandole y mordiendole los labios. Entonces el sombrerito rodo por el suelo y de a poco Franz la doblego hasta esta quedar acostada en el verde prado. Con la dificultad de un hombre angustiado y excitado, bajo sus pantalones a la altura de las rodillas, subio las telas de la falda de Mimi y se acosto sobre ella. La joven dio un salto al sentirlo dentro suyo y le abrazo la cintura con las piernas.

Se abrazaban, gemian , disfrutaban. Franz se movia de lento a rapido, dando todo de si con cada embestida, ella le miraba fijamente a los ojos, cosa que a su primo le volvia loco. Estaban absortos el uno con el otro, cada uno gozando de las sensaciones que aquella copula les daban. Tan absortos estaban que olvidaron que en los alrededores estaban Karl Ludwig y su mujer. Estos habian ido de visita a la casa de Carolath aprovechando que Karl debia de hablar algunos asuntos con su hermano. Por mientras que los hombres conversaban, Maria Theresa y Carolath decidieron sacar sus perritos a pasear por el bosque circundante. Aquel dia Theresa andaba de un particular buen humor, debido a los logros de sus dos pequeñas hijas que eran su sol y orgullo. Paseaban ambas tranquilas conversando y riendo de mil cosas cuando el pekines de Maria escapo.

-Pero que rebelde me ha salido. Creo que Otto le ha pegado todas sus malas mañas.. dijo en tono de broma.

-Que cosas dices! .-contesto Carolath riendo.- Te espero aca que se me va el aliento.

Entonces la mujer se interno entre arbol y matorrales para buscar al perrito. No camino mucho hasta encontrarlo, pero, para la mala suerte de los jovenes amantes, muy cerca de ellos, tanto que podia escuchar el sonido de los besos y los gemidos. Theresa curiosa, sin hacer el menor ruido, siguio los sonidos hasta que dio con ellos. Lo que vio la dejo espantada: su hijastro, con los pantalones abajo, jadeando como animal y debajo suyo una febril Sophie , rasguñandole la espalda.

Petrificada, apretando su can, volvio donde Carol .

-Y quie te ha ocurrido?. Pareciese que has visto un fantasma.

-No, nada. Son solo mareos y palpitaciones.

-Ah...ya veo. Entonces volvamos a casa y mandare a que te hagan un tecito.

-Gracias.- contesto con la garganta apretada.

Toda la tarde la mujer se la paso muda e impavida, no pudiendo sacar de su mente aquella "horrible" imagen. Tanto que confiaba en Franz, en su sentido comun y ahora le encontraba fornicando como animal con su prima!. Sabia del amor de este por ella , pero jamas penso que llegaria tan lejos. El no era pasional como Otto...por lo menos eso pensaba hasta aquel dia.

Al volver la pareja a casa. Karl noto a su esposa extraña.

-Cariño, ocurre algo?

Theresa se mordio el labio y luego cayo pesada sobre el sillon.

-Ni te lo imaginas.- contesto suspirando y afirmandose la cabeza con la mano.

-Dime, que ya me tienes curiosa.

-Es Franz.

-Que con el?.

-Es que hoy me he topado con el en el bosque..

-Y...?

-Dios santo, Karl...

-Que ocurre mujer!. que me asustas!

-Que he agarrado a Franz con Maria Sophie...fornicando.

-QUE?!!!!


El grito que dio el escandalizado hombre retumbo en toda la mansion. Su mujer le miraba copn los ojos abiertos de par en par, mientras este caminaba de un lado para otro, con la cara roja de ira y verguenza. Aquello era lo peor que su hijo podria hacer, mas aun cuando lo habia hecho con su prima.

-Como pudo ser capaz...como!.

-Yo tampoco lo entiendo. Siempre ha sido muy sensato y...

-Donde esta el?

-No se...Sophie volvio sola a casa. Quizas ya este acostado.

Karl hecho furia subio rapidamente los escalones y entro intempestivamente en el cuarto donde su hijo dormia. Le levanto violentamente y tiro al suelo. El pobre , aun adormilado, no entendia nada.

-Que ocurre, padre?

-Tu...TU!. Por que!.- bramaba

-Que cosa?

-Me lo esperaba de Otto, pero nunca de ti, hijo mio.

-Me confundes.

-Que te confundo? TU me confundes a mi!. Como fuiste capaz...

Aun no entendia que ocurria. Entonces su padre le solto

-Mañana iremos a hablar con tu tio Franz y luego con Ludwig y Carolath. Remendaras el daño causado.

-Que?

-No te hagas el tonto. Lo se todo!. Todo lo tuyo con Mimi...

Quedo helado. Pero como sabia?. Se lo habria dicho Otto?.

-Padre...yo...

-Te han visto en el mas deleznable de los actos. Deberias sentir asco de ti y de ser incapaz de controlar tus impulsos y lujuria!

Quedo de una pieza. No solamente sabia que habia iniciado una relacion con su prima, sino que tambien de las relaciones carnales entre ellos. Y que los habian visto!. Pero quien?. Quedo en silencio y bajo la cabeza mirando al suelo. Luego lentamente se puso de pie.

-Y?! no vas a decir nada?!

-Padre. Yo amo con toda el alma a Sophie, por eso creo que lo que nosotros hemos hecho, aunque vaya con las reglas de dios, sera perdonado, porque no hemos fornicado, hemos hecho el amor.

Karl trato de decir algo pero su hijo le interrumpio.

-Tambien aceptare como hombre mis actos adelante de quien sea. No me averguenzo ni arrepiento de nada. Estoy enamorado y como hombre enamorado, yo...yo quiero desposar a Mimi.

-Ah si?.- dijo el hombre algo perplejo

-Por supuesto. No hay nada que desee mas fervientemente.

El hombre suspiro y luego dio una sonrisa algo apagada a su hijo mayor. A pesar de que sus actos afectaban profundamente su fe, estaba feliz de ver que no habia perdido del todo la chaveta y que seguia siendo el hombre sensato que criò.

Entonces al dia siguiente, ambos se dirigieron donde el emperador el cual les miraba curioso.

-Y?, ustedes diran para que soy bueno.

-Tenemos que pedirte algo muy importante.- dijo Karl

Franz temblaba al mirar a su tio. Este le miraba de reojo y algo tentado de la risa por comos e encontraba el pobre muchacho.

-Ya, digan.

-Ya pues!.- dijo dandole un codazo a su hijo

-Yo, yo quiero la mano de Marie Sophie.

El kaiser quedo estupefacto con la peticion. Primero balbuceo y dijo:

-Que?

-Me quiero casar con Mimi.

-Y ella quiere?. Le han preguntado?

-Bueno, precisamente, lo que ella opine, creo que debidos a las circunstancias, da lo mismo...

-De que hablas?.- pregunto algo extrañado Franz J.

El joven bajo la cabeza avergonzado y carraspeando, Karl respondio:

-Pues...que el asunto esta "consumado".

Franz Joseph se puso rojo y unas ganas de agarrar de la solapa a su sobrino le invadieron. Pero respiro hondo y dijo:

-De ser asi...

-Nos urge hacer todo lo mas rapido posible. Quien sabe si aquellos "actos" tuvieron consecuencias.- menciono entre dientes Karl Ludwig

-Padre...

Aquello puso aun mas nervioso y furioso a el emperador, al cual no le quedo mas que aceptarla propuesta y firmar el futuro de su hija.

-Ire a hablar con Carolath y Ludwig. Mañana haremos una cena y se anunciara el compromiso. El matrimonio sera en menos de tres meses....en caso de haber "consecuencias".

Estrecharon manos sellando el acuerdo y el apreton fue particularmente mas fuerte para Franz Ferdinand al cual ni le importo, porque estaba en el cielo imaginandose marido de Mimi.

Al kaiser le toco la incomoda tarea de comunicarle a su hermano y a Carol que Sophie se casaria con su primo. La mujer, la que sabia perfectamente el amor de su hija por Otto, se nego acerrimamente al compromiso.

-Tu estas loco!. Como se te ocurre casar a la niña con Franz!

-Tiene que ser asi..

-Y por que?!

-No me hagas contartelo que lo imagino y me siento enfermo.

-No me digas que...

-Si...los dos . Los han pillado con las "manos en la masa".

-Dios santo...Pero Otto...

-Otto no tiene absolutamente nada que ver!. Dime, y esta seria la unica "carta de escape" de Sophie...Ella ya ha menstruado?

-P..pues si..

-Entonces nada se puede hacer. Lo siento.

Carolath cayo sobre el sillon, justo al lado de Ludwig que observaba silente la situacion.

-Ardera troya...lo saben, no cierto?.- solto

-Pues no queda otra, hermano.- termino por decir antes de tragar de un sorbo el whisky que tenia en su vaso.

-Y cuando piensan decirle a Mimi todo esto?

Todos guardaron silencio y nadie se atrevio a contarle nada a la joven hasta la cena. Esta se desarrollo en casi completo silencio, pudiendose cortar el ambiente con cuchillo carnicero.

-Y a ustedes que les pasa!. Esto parece un funeral- termino de decie Marie Sophie mientras bebian un aperitivo en el living.

El unico que sonreia nervioso era Franz Ferdinand, el que no soltaba la copa de vermouth. Carolath se acerco a su hija y la sento a su lado. Le agarro la mano y a continuacion, el show comenzo. Karl se puso a hablar de las virtudes del matrimonio y demases. La joven comenzaba a bostezar aburrida, haciendole ojitos a su primo el que se los respondia con mas sonrisas nerviosas. Luego Karl miro a su hijo y este se puso de pie. Temblaba cual gelatina...

-Y a ti que te ocurre!.- dijo muerta de la risa Mimi

-Yo..Marie Sophie...le he pedido la mano a tu padre..

Miro hacia Franz Joseph y Ludwig los cuales estaban impavidos y expectantes, al igual que Maria Theresa y Carolath, la que le apretaba fuertemente la mano a su hija.

-Esto es una broma, no cierto?

-No, no lo es. Franz Ferdinand ha hablado con nosotros y debido a los acontecimientos...- susurro Ludwig.

-Que "acontecimientos"?.- pregunto confundida

-Mimi...lo saben todo.- respondio su primo

Estaba helada, titubeaba y no sabia que decir.

-Yo...no me siento bien...

Se puso de pie apenas y chocando con los muebles, trato de dirigirse hacia su dormitorio. La intercepto su madre con los ojos llenos de lagrimas. Se imagino a ella misma, casi veinte años atras.

-Amor. Se sensata. No hay nada que no tenga solucion.

-Ustedes no me pueden obligar.- respondio con mirada fiera.

-Hija, por favor...

Franz se sentia desfallecer por la incertidumbre. Su madrastra le abrazaba y daba apoyo en silencio. Ludwig de lejos le guiño un ojo a su hija y esta, analizando la situacion y suspirando hondo, respondio :

-Esta bien..Esta bien. Franzie...acepto.

El joven respiro aliviado y sonriendo y todos sonrieron. Luego, miles de brindis por el compromiso y los novios.

Que llevo a Mimi a decir si?. El recuerdo del matrimonio de su madre con Ludwig Viktor. Ella haria exactamente lo mismo. Estaria casada, le daria el gusto a la familia, pero seguiria viviendo una vida normal y libertina con Otto, eso si, con el amparo que da aquel bendito anillo en el dedo. Tambien tendria ,siempre que ella quisiese, lo que tanto anhelaba, aquella nueva sensacion que habia descubierto con su primo, la cual le habia convertido en adicta y codiciosa de tener aun mas y mas.

Despues del salud, la joven enrollo su brazo con el de su prometido y le beso suavemente la mejilla. Este le acaricio detras de las orejas y beso dulcemente los labios, no imaginando lo que su futura mujer tenia en mente... La creia suya, por fin completamente suya...


Pero no...


Con el tic tac del reloj, Franz Ferdinand, con lagrimas en los ojos, se quejaba de su triste suerte, ansiando tener de vuelta a aquella apasionada mujer con la que se habia casado siete años atras...

lunes, 27 de julio de 2009

Meet the Habsburgs : "Fulfilled wishes"



Otto , sin que los invitados lo notasen, salio corriendo hacia la salida en donde encontro a su amigo, el doctor Jensen, fumando nerviosamente.

-Muchas gracias por el favor. Ya vere como te lo recompensare.- dijo sonriendo

-Las cosas que me hacen inventar!. Y que si la archiduquesa pide una segunda opinion?. Ahi el diagnostico sera el acertado y mi reputacion se ira al infierno.

-Que eso no ocurrira. En un par de dias mas volveremos a Francia.

-En el estado quese encuentra no deberia hacerlo.

-Tan mal esta?

-Pues esta vez se le ha complicado. Cuando tomaran consciencia de que esto no es un jueguito?. No puede someterse a esa "intervencion" cada vez que se vean en apuros.

-Fue de urgencia. Ademas yo no lo sabia..- mintio

-Pues estate mas atento con ella, y dile a su marido que haga lo mismo. Si continua en esa actitud, puede perder la vida.

Se despidio rapidamente y subio al carruaje. Otto apretaba el puño, recordando el dia que encontro a una Mimi vestida de gala sentada en la cama mirando a la nada.

-Nos vamos, amor. Que te ocurre?.

-Lo peor...

-Vamos! no me metas miedo. Te sientes mal?.

-Pesimo. Tengo la bilis haciendo olas en mi garganta.

-Eso te pasa por tragona!

-Ojalas fuese eso.

Se acerco a ella y sento a su lado. Agarro suavemente la mano enguantada acariciandola.

-Cuentame, Mimi. Que ocurre?

-Pues que tu hermano lo ha hecho de nuevo!

No necesito decir mas. La ira en los ojos de su amada y la impotencia latiendo en su pecho basto para que el joven supiese de que hablaba. Le abrazo, consolo y luego partieron a la fiesta con la promesa de una solucion rapida. Siempre era lo mismo, ya sabian como seria el asunto, asi que luego , Sophie se tranquilizo pudo de disfrutar de las locas noches en la casa de los Marqueses de Morni, intimos amigos de ambos.



Por su parte, Franz batallaba con Carolath para entrar al dormitorio y hablar con su mujer.

-Deja que descanse, mañana le pediras explicaciones.

-No no puedo!. necesito hablar con ella.

-Que diablos, chico!. Por favor!. Baja a compartir con tu hija y deja a Sophie descansar. Ya ambos han hecho bastante hoy...

Abatido, se dejo vencer y bajo junto a su suegra al gran salon en donde los niños continuaban la fiesta. A pesar de ser temprano, casi las cinco de la tarde, el dia se habia oscurecido bastante, anunciando que pronto , la lluvia caeria.

-Papà, donde esta mamà?.- le susurro Miana

-Esta descansando. Esta bastante cansada con el viaje.

-Que pena. Queria que me viese soplar las velitas.

Le abrazo y cerro los ojos. Se vio ahi mismo en aquel mismo salon, hace sai nueve años atras, observando como su prima tocaba una dulce melodia de piano. Aun tenia la imagen de Sophie salir del agua con aquellas telas transparentes y pegadas al cuerpo. Tambien tenia en mente el plan que habia creado para hacerla suya.

Mimi, sin saber nada de lo que se maquinaba en la mente del sonsito "Franzie" alternaba mirada con Otto y a la vez con su "primo" Rudolph el cual ultimamente se habia acercado mucho, "demasiado" a Sophie, segun la opinion de sus devotos primos.

En su mente la muchacha sentia locos deseos de seducir al mayor de sus primos, para asi sacarle canas verdes a el Kaiser, pero tambien, deseaba ardientemente entregarse a Otto. La pareja habia tenido un par de intentos fallidos durante los ultimos meses, todos interrumpidos por Mimi, la cual no aguantaba el dolor. La ultima vez habia sido en el estudio de Ludwig durante una cena familiar. Ambos yacian desnudos de la cintura para abajo, apretados y casi delirantes. Otto era el que avanzaba mientras su prima se retorcia debajo apretando involutariamente los muslos.

-Mimi, por favor...-suplicaba

-No..sale...sale!. Duele.

-Se supone que debe doler.

-Quien te dijo eso!. Mentira!, sino las mujeres no se llenarian de hijos y no habrian prostitutas.

-Es solo la primera vez..

-Dejame!, por favor!

Lo empujo a un lado y dificultosdamente bajo las enaguas y falda.

-Juro por dios que sere tuya pronto. Ahora no, porque no es el lugar ni el minuto. Seras paciente y me esperaras?

Resoplando y decepcionado, movio la cabeza y luego murmuro:

-Siempre.

La joven se acerco a besarlo y ayudarle a vestirse para que ambos , a destiempo, bajasen a juntarse con los demas. Salieron del cuarto entre risitas y apretandose fuertemente la mano, no sintiendo la presencia de Franz Ferdinand , el cual estuvo todo el rato con el corazon en la garganta escuchando cada uno de los susurros, suspiros y gemidos de la pareja. Aliviado, mas no cien por ciento tranquilo, empezo a ingeniarselas para impedirle a su hermano lograr su cometido. El no la tocaria primero que el...


Fue entonces que una noche los escucho conversar sobre que "El momento" seria el dia del cumpleaños de Carolath. Delirante y algo fuera de sus cabales por la fiebre que lo calcinaba desde hace algun tiempo, el joven de 17 años esperò pacientemente que llegase el dia y se presento en la gran fiesta con el mentado plan entre manos. Miro con rabia como Mimi bailaba alegre con Rudolph, luego pasaba a los brazos de su hermano y a escondidas, tomaba largos sorbos de champagne. Reia divertida y sonsacaba a Franz con sus bromitas.

-Y tu no bailas, sonsito?

-Yo...

-Vamos!. Saca a bailar a Gisela...o a Valerie!.

-No quiero bailar.- replico apretando los dientes.

-Ah...y yo te insisto. Bueno..sigue disfrutando la fiesta!.- replico burlonamente

Y partio corriendo hacia donde sus amigas, guiñandole un ojo a lo lejos a Otto el cual tambien estaba expectante por lo que pasaria en un rato mas. Entonces, el joven supo que tenia que actuar. Se acerco a su hermano y le susurro:

-Me he robado una botella de bourbon.

-Que?. Tu?!.- respondio riendo

-Claro. Tu sabes que a veces tambien bebo y...

-Ya...Donde la tienes?. Que ya este liquido insipido me tiene aburrido.

-En la fuente del jardin, vamos.

Se dirigieron hacia afuera y le sirvio una copa. Luego otra y otra hasta que Otto comenzo a sentirse mareado.

-Que cosas, no?. Que Bourbon es este que marea tanto?.

-El que toma tio Ludwig.

-Aja! ya veo!.- bramaba riendo.

Franz saco el reloj de su chaqueta y vio la hora. Diez para las once, hora en la que se iban a juntar Sophie y su hermano en el estudio de Ludwig Viktor. Se excuso con Otto, el cual ni le hizo caso y corrio hacia donde estaba su madrastra, Maria Theresa.

-Que ocurre, querido?

-Es Otto.

-Que pasa con el?

-Esta algo mareado alla afuera.

-Dios santo!, Este niño!. Donde esta?

-Sentado al lado de la fuente.

Discretamente, la mujer se escurrio en busqueda de su hijastro y Franz, tragando saliva se dirigio al tercer piso...

Camino lentamente, casi no haciendo ruido, vibrando con cada risotada , camino al encuentro de su amada. Al llegar frente a la puerta respiro hondo y dio vuelta el pomo. Adentro estaba todo en penumbras , pero aun podia distingir lo claro de las telas del vestido de Mimi. Esta estaba de espaldas y al sentirse acompañada, susurro :

-Que demorabas!

Apreto los ojos y sintio como se cerraba la puerta. Franz se acerco a paso lento pero largo hasta que la tuvo lo suficientemente cerca. Queria tocarla, queria besarle la nuca, pero vacilaba, muerto de nervios, a la vez que se sentia algo envalentonado con el licor que habia tomado. Mimi por su parte, escuchaba ansiosa y llena de deseo la respiracion casi jadeante del que creia Otto. Aun dandole la espalda y apretando los ojos, dijo:

-Y...que esperas para desnudarme?. Sacame este vestido.

Tembloroso, acerco los dedos a la espalda y comenzo a sacar boton tras boton. Luego, sin pedir mas ordenes, desato los lazos del corse y por fin, se atrevio a besarla, comenzando por la nuca y bajando por la espalda, a medida de le sacaba la ropa interior. Al estar completamente desnuda, Mimi se dio lentamente vuelta, aun con los ojos cerrados y fue ahi que Franz le beso apasionadamente. Ella se aferro y apego a el casi desesperadamente y le saco violentamente la casaca. Daban vueltas por la habitacion, gemian y temblaban. Por fin el momento tan ansiado para ambos habia llegado...

Cuando separaron sus bocas para recobrar algo el aliento, Sophie lentamente abrio los ojos y se sorprendio al ver que el que besaba no era quien ella creia...

-Franz!.- chillo

-Sophie..yo..por favor...

-Donde esta Otto?.

-Eso no importa...yo estoy aqui. Yo..

A pesar de su "horror", Mimi no le alejo cuando este lentamente bajo a besarle el cuello y los pechos. Ya estaba ahi, lista y dispuesta y no se echaria atras. Solo cerraria los ojos e imaginaria que era su "Schonen Otto".

Lentamente se dejo llevar, acostandose sobre la alfombra, ayudando a Franz a desnudarse y dejando que la besase y acariciase, mas que mal, todo aquello le estaba gustando, y mucho. El joven ,emocionado, no podia parar de mirarla. Por fin, despues de tantos meses deseandola, de tantos años amandola, seria suya. Apoyo ambas manos en el suelo, rozo su nariz contra la de ella y con suaves movimientos la hizo suya.

Se apretaban, queriendose fundir aun mas, Sophie ya casi no sentia dolor y se entregaba al placer al igual que su pareja que no paraba de observarla y acariciarla. La imagen era sobrecogedora, ambos cuerpos moviendose ondulantemente al ritmo de gemidos suaves, iluminados por la luz de la luna. Luego vino el momento cuspide, explotando ambos casi al unisono entre besos y movimientos que de lentos habian subido la intensidad. Se miraron algo confundidos, sonrieron , quedaron un rato abrazados , aun unidos, agotados y sin aliento.

Al separarse, Franz se arreglo y luego ayudo a su prima , la cual sentia una extraña pero calida sensacion en el cuerpo. Nadie pronuncio palabra, todo fue como en camara lenta...

Al estar listos, caminaron juntos hacia la salida y fue entonces cuando Sophie dijo

-Esto no se volvera a repetir.

-Pero por que?

-Tu sabes por que.

-Te arrepientes de lo que ha ocurrido?. Si lo haces, no me importa, pero quiero que sepas que yo no y que atesorare estos momentos por el resto de mis dias.

Mimi le miro casi burlona y luego le solto:

-Pero que cursi eres!.

Rio a carcajadas mientras el joven le miraba desencajado y luego bajo a la fiesta. Aun asi ella hubiese sido hiriente con el, no le importaba, el habia sido el primero, y nadie le quitaria aquel privilegio. Ahora era solo cosa de perseverar y pronto la haria definitivamente su mujer...para siempre.

Perseverar...perseverar...

Primero que nada se encargo discretamente de mandar a su hermano a una academia militar a las afueras de Salzburgo, asi tendria total libertad para cortejar a su prima. Karl, que siempre escuchaba a su hijo, tomo en cuenta la sugerencia de este y en menos de una semana estaban despidiendose en la estacion de trenes. Al abrazar a su hermano mayor, le susurro al oido :

-No creas que no se cual es tu jueguito. Lo se todo, Sophie me lo ha dicho.

-No se de que hablas.

-No te hagas el bobo. Solo quiero que sepas que esto es mucho mas fuerte de lo que tu crees, y no importa lo lejos que lleges con ella, siempre sera mia.

Le sonrio burlescamente y luego subio al tren. Franz solo atino a sacarse el sombrero y menearlo en el aire en forma de despedida, luego fue directo a la residencia de su tio Ludwig a visitar a Mimi, la cual solo le miraba de lejos entre risitas.

-Espero que no te haya molestado que le contase a Otto lo que ocurrio.

-Era lo justo, merecia saberlo.

Silencio, solo el tic tac del reloj y el ruido que emitia la joven al reir. Estaban solos, Carolath y Ludwig habian salido de visita a casa de unos conocidos y la chaperona brillaba por su ausencia. Oportunidad ideal para el joven archiduque que se acerco a ella y comenzo a besarle el cuello apasionadamente .

-No..

-Por que no?

-Porque no quiero. Anda! dejame!.

-Te deseo tanto...

-Pues...(suspiros y gemidos)Yo no!. Alejate ya!.

-Sophie...- suspiraba febrilmente en su oido.

La muchacha se puso de pie y luego dijo :

-Vete...Si quieres vuelves mañana y salimos a pasear.

-Si?.- dijo emocionado

-Sosito!, claro que si!- suspiro corriendo hacia su dormitorio.

Aquel paseo marcaria sus vidas para siempre. Sellaria el destino de la pareja y abriria un nuevo capitulo en este naciente "romance"....




-Cumpleaños feliz, te deseamos a ti. Feliz cumpleaños, querida Miana, que los cumplas feliz!. Bravo!!.- cantaban todos al unisono. La niña sonreia encantada y emocionada.

-Anda, amor. Pide un deseo.- dijo Franz a su hija

-El que yo quiera?.

-Si, pero debes decirlo en silencio para que se cumpla.

-Esta bien!.

Cerro los ojitos y soplo fuertemente hasta apagar las seis velitas que adornaban el pastel.

-Ojalas se cumpla pronto.- dijo tomando con sus manitas el rostro de su atribulado padre.

-Seguro, preciosa.- murmuro sonriendole

Desde lejos, Carolath y Franz Joseph veian la escena, apretandose disimulada, pero ansiosamente las manos, mientras arriba, Mimi aferrada a Otto, ansiaba salir rapidamente de aquella casa que tanto detestaba.

(Continuara..)

miércoles, 22 de julio de 2009

No se asusten! ,. Es solo un pequeño intermedio

Como dice el titulo, no se asusten que este es solo un pequeño intermedio, porque el noveno capitulo de la saga Habsburg ya viene.


Bue, primero que nada quiero (para variar) hacerle propaganda a mi rincon pervertido online que es "Dark Victoriana". Aun, aunque hayan llegado nuevos, estamos algo stand by (por proyectos propios y estudios), por eso, queremos volver a llenar la casa , esta vez con gente real, no con los amantes y amigos imaginarios de loc@s ¬¬ (JA!).




Asi que, todos los amante de las eras victorianas y eduardiana, de lo paranormal y de lo que en aquellas epocas se consideraba "indencente", estan invitados a unirse y a crear historias de lo que hubiesemos querido ser de haber vivido en aquellas eras...

Click Aqui , para unirse a la comunidad Darkvictoriana.



Segundo. Desdes que este lugar lo quiero dejar algo mas o menos "safe for work", he creado una cuenta en toidorelatos.com para todos mis escritos que incluyan alta y explicita carga erotica. asi que si quieren leer la ultima historia que he escrito, la de un satiro Crownprince Carol de Rumania seduciendo y haciendo amante a una sencilla e inocente campesina, siganme
Aqui



Tercero y ultimo : Desde hace algun tiempo (ya casi un año ¬¬) deje de escribir una historia que a mi personalmente me llega mucho ya que se derivo de una serie de sueños a, los cuales interpreto como atisbos de mi vida pasada. Es la historia de una discola niña de 15 años de finales del siglo XIX que descubre la vida, el amor, los placeres de la carne y etc, plasmandolo todo en su diario de vida. No he publicado nueva entrada ya que estoy trabajando enn ella right now , asi que, los que quieran conocerla, tienen 24 entradas para ponerse al dia. Para los que no la conozcan, se las presento :
Catalina Ortuzar



Los dejo. Pronto, nuevas entregas de los Habsburg (aqui), de Carol y Marioara (en todorelatos) y de Catalina (en "Niña Discola"), asi que, esten atentos!!



Goodie of the day :


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miércoles, 8 de julio de 2009

Meet the Habsburgs : "Like Romulus and Remus"


Sophie apenas susurraba y su marido estaba a punto de perder la cordura. Se sentia asqueroso y culpable del colapso de su mujer la cual no paraba de sangrar.

-Que mierda le hiciste a Sophie , Otto?!!.

-Y me preguntas?. Has sido tu TU!!

Entonces irrumpio Carolath y al ver a su hija en aquel lamentable estado, llamo a la sirvienta para que fuese rapidamente a buscar al doctor, pero que hiciese todo con total discrecion para no alborotar los animos en la iesta y en especial, para que Franz Joseph no se diese por enterado.

-Accidente a caballo...creen que naci ayer?.- dijo molesta a su sobrino

-Que insinuas, Carol?.- pregunto Franz F

-Mejor que lo hables con tu mujer cuando reaccione, dios santo. Que niña mas loca!.

-No se imagine cosas que no es nada de lo que usted piensa.- dijo Otto tranquilo, pero con las mejillas al rojo vivo.

Para la suerte de los jovenes, el doctor que atendio la llamada fue un camarada de fiestas de la pareja, el doctor Johan Jensen, el cual despues de examinar a la joven, dio su "diagnostico".

-Es su periodo, solo que mas abundante debido a la caida.

-Esta seguro?.- pregunto la mujer preocupada

-Pues si. No se preocupen, solo tienen que alimentar a Sophie con alimentos ricos en fierro y vitaminas. La pequeña necesita recomponerse de aquel fuerte golpe.

Carol, algo desconfiada despidio al galeno y quedo a solas con Otto y Franz los cuales no paraban de darse miraditas de odio. Dos hermanos, los cuales habian sido unidos, separados por una mujer...

Todo habia comenzado en la pre adolescencia cuando ambos vieron florecer a una bella Marie Sophie ante sus propios ojos, hermosa, de cabellos dorados, profundos ojos celestes y boca mordedora. Se le solia ver serena pero detras de todo, era la instigadora de travesuras infantiles, fiestas a escondidas y demases. La pobre habia adquirido un caracter discolo y rebelde despues de la muerte de su hermano menor cuando la vida familiar tomo un rumbo sombrio y decadente. Ludwig y Carolath se entregaron a la bebida, las fiestas y cuanta cosa dañina se les cruzasen por delante, siendo la pequeña testigo de todo esto.

No era raro que cada noche hubiese alguna bacanal en casa. El matrimonio recibia a sus amigos, tomaban y comian hasta perder el control y luego armar escandalo entre gritos y risotadas. Mimi era testigo de todo esto, espiando por las puertas semiabiertas como sus padres perdian la cordura en aquellas orgias de licor y perversion.

Ella jamas olvidaria una de las visitas "habitue" de estas fiestas, el principe Philippe de saxe Coburg, el cual, mas que por las libertinas amigas del matrimonio, parecia tener un fuerte interes por Carolath, tomandola para si cada vez que podia. Philippe era amigo de años de Ludwig y se habia hecho visitante frecuente de la mansion despues del fallecimiento del pequeño. En la desgracia de aquella muerte , el principe habia encontrado la oportunidad que deseaba hace tiempo para hacer de Carol su amante.

En los oscuros recuerdos de Mimi, quedarian las veces que encontro a su madre, semidesnuda, sentada en el regazo de aquel desagradable hombre, mientras leia versos bastante subidos de tomo y la mano de el perdiendose bajo las blancas enaguas con ondulantes movimientos, o cuando ya casado con la joven Luisa de Belgica, se desnudaban y corrian borrachos por la casa. Mimi era testigo de todo esto porque se negaba profundamente a pasar los fines de semana junto a su hermano, con aquel hombre que tanto detestaba, Franz Joseph y preferia hacerse la dormida y vivir en la decadencia junto a sus padres.


De repente , sin aviso, las fiestecillas de a poco terminaron, hasta que la casa volvio a sumergirse en el silencio. Ludwig salia seguido y Carolath se quedaba en casa bordando o recibiendo visitas de sus amigas. Se negaba a recibir las visitas de un arrepentido Kaiser el cual ansiaba con volver a tener aquella complicidad intima de antaño. La joven estaba parca, apenas atendia a sus hijos y se le veia palida como papel.


Solo tiempo despues se supo el motivo de esto. Sophie como siempre espiaba tras de las puertas cuando un furioso Philippe irrumpio en la mansion.

-Y a ti que carajos te pasa!.

-Yo...prefiero que no vengas mas.

-Pero por que?!. Carolath, nosotros nos entendemos, nos llevamos muy bien!. si piensas que Louise es la traba de todo, pues no lo es. Ella sabe la relacion que tu y yo tenemos...

-Quiero que te vayas...

-Carol, por favor...

Se agarraba de las faldas de la mujer la cual miraba hacia abajo con los ojos mojados en lagrimas.

-Que te ocurre?.

-Quieres saberlo?.

-Pues si! Lo que sea que impida nuestras citas, quiero saberlo!.

-Yo...

Mimi no escucho bien, pero la forma como se le deformo la cara al hombre fue radical. Rojo de ira, levanto del brazo a Carolath la cual tenia aun la vista fija en el suelo.

-Es mentira!.

-Te mentiria con algo asi?.

-Dios mio...dios mio. Esto no puedo ser, tu lo sabes bien!.

-Y que haremos entonces?. Ya esta hecho!.- respondio pegandole en el pecho.

-Pues lo arreglaremos!.

-No...

-Que dices?!

-No. No arreglaremos nada. Vete...ya no quiero verte mas.

Le empujo y camino arrastrando los pies hacia el pasillo. Phillipe temblaba de rabia y se acerco a ella gritando

-Estas loca! . Sabes que no puedes!!. Esto sera completamente distinto a tus "historillas" anteriores!. Sera notorio!. Que dira Louise?!. Que diran sus padres!.

-Me importa un carajo. Vete, desaparece de mi vida.- respondio suavemente mientras se apoyaba al portal para no desfallecer.

El hombre camino decidido hacia ella y le volvio a agarrar del brazo, se perdieron tras el umbral de la salita y se escucho un fuerte portazo. Silencio...


Sophie se aferraba a "Bonni", temblando de inquietud por aquella macabra tranquilidad despues de la tormenta. Minutos despues escucho como la puerta se abria y el hombre salia apresudaramente arreglandose el sombrero. Mas silencio. Mimi decidio ir lentamente , movida por un sombrio presentimiento, a ver como estaba su madre. Suavemente, casi en puntillas, se dirigio al cuarto contiguo donde encontro a Carolath echa ovillo en el suelo, llorando suavemente y agarrandose el vientre.

-Madre?.

No le contesto, solo sollozaba.

- Mamita que te ocurre?.

Se acerco a ella y vio como trataba de ocultar parte de su rostro notoriamente rojo e hinchado.

-Mami...que te hjizo aquel hombre?.- pregunto arrodillandose junto a ella.

-Vete a tu cuarto, Mimi. Dejame sola...

-No, no te dejare solita...

Carol se retorcia y su cara demostrabsa dolor profundo. Sophie se acerco a ella y al moverla para acurrucarla pudo ver un pequeño charco de sangre. Aquello la horrorizo de sobremanera, solo atinando a dar el mas pavoroso de los gritos.

-Mamà!!!!!!!!

Fue entoncves que las sirvientas fueron a su ayuda y pronto Ludwig estuvo en casa para consolar a su mujer. Sophie le conto todo lo que vio, con lujo de detalles y pronto la noticia del estado de Carolath llego a oidos de Franz Joseph el cual no dudo en vengarla, mandando un grupo de matones a darle la paliza de su vida al principe, el cual, despues de aquel episodio, desaparecio de la corte vienesa, mas no su mujer Louise que, a hurtadillas se escapaba a la casa de su amiga para verla y conversar. Sabia todo lo que habia ocurrido y aborrecia con toda su alma a aquel marido impuesto que habia resultado ser una bestia en todo ambito.


Por su parte, las vidas de Carolath y Ludwig dieron un cambio radical, ambos conservando su estrecha amistad, pero haciendo vidas discretas y paralelas. Por su parte, Ludwig tenia amorios con uno que otro joven y Carol, aun destruida por la perdida de dois hijos, habia conocido gracias a su marido a un atractivo tenor frances llamado Victor Capouel, el cual se convirtio en su ferviente y fiel amante por años.

Con madre y padre ausente, extrañando a su "pere" Napoleon y criandose con institutrices, llego Mimi a la adolescencia. Se habia convertido en una mujer preciosa, de curvas pronunciadas, y un innato toque de distincion al vestir, hablar y andar. Era una muchacha que, a pesar de su corta edad, desviaba miradas y daba que hablar, aun asi no hubiese sido aun presentada en sociedad.


Su mundo giraba alrededor de su primo Otto, fiel compañero y las artes teatrales. Mimi cantaba, actuaba, bailaba y era virtuosa del piano, causando el orgullo de su padre "adoptivo, Ludwig, su madre y su padre biologico, el cual veia de lejos las hazañas y logros de la hija que nunca lo reconocio como progenitor y que le odiaba con toda su alma.

Por otro lado, sus primos mayores le seguian cual perritos falderos donde ella fuese, pero al unico que ella consideraba era a su "Otto". Franz Ferdinand era el que siempre estaba ahi, pero que miraba desde lejos la complicidad que su hermano menor tenia con la mujer que lo traia loco desde que tenia memoria. Franz sentia amor verdadero por su prima, de esos amores calcinantes y llenos de pasion juvenil. Mientras observaba con furia a su hermano el cual impavido fumaba en un rincon, recordo aquella tarde de 1880 cuando, junto a Otto, siguieron a Mimi y amigas a un riachuelo internado en un bosque cercano a la casa de sus tios. Era un dia de calor excepcional y Sophie habia decidido ir a resfrescarse al rio. Sus amigas estaban un poco reticentes a la idea.

-Pero, como lo haras? te pondras traje de baño.- pregunto Lettice

-Pues no, desnuda.

-Estas loca!- farfullo una de ellas llamada Eliza.

-No, pero que quieren que haga? que me meta con aquella horrible pieza de lana?.

-Es lo que se usa para esos casos.

-No. A lo mas me dejare la ropa interior.

-Yo creo que...

-Nada, Eliza. Van o no van conmigo?

-P...pues si. Pero para cuidar que no hayan moros en la costa.

Partieron felices con una cestita de cosas para comer y riendo algo escandalizadas por lo que ocurriria. Por su parte, los hermanos que habian escuchado todo, siguieron sigilosos a las tres chicas, cuidando de no ser vistos. Al ya estar instaladas, , Mimi comenzo a desvestirse rapidamente porque ardia de deseos de que su piel tuviese contacto con la resfrecante agua. Otto, que ya habia tenido oportunidad de verla semidesnuda , solo reia picaramente al observarla sumergirse y emerger con la ligera tela pegada a su piel, mientras Franz alucinaba, incluso recordaba haber babeado al verla. Era todo lo que habia imaginado en sus fantasias y mas. Estaba tan alterado por la vision que tenia en frente que salio corriendo hacia detras de un pino para respirar hondo y calmar sus palpitaciones, pues su corazon parecia querersele escapar del corazon.

-Y a ti que te pasa? que nunca habias visto a una mujer en paños menores?- pregunto Otto muerto de la risa

No le contestaba, miraba al suelo y de a poco, mientras su hermano le cuchicheaba, comenzo a urdir un plan para que su prima cayese definitivamente en sus brazos...



-Que le hiciste a Sophie?.- susurro a su hermano

-Nada. Yo jamas le haria daño.

-Llevas haciendoselo toda una vida.

Otto se puso lentamente de pie y dirigio hacia su hermano. Luego, muy tranquilamente, le solto :

-El que le ha hecho daño eres tu. Tu te entrometiste entre nosotros. Nunca olvides eso.

Dio una larga aspirada al cigarro para luego tirarle el humo en la cara a Franz el cual permanecia livido, con la vista fija en el cuarto de Mimi, pensando en como todo habia pasado y que, a pesar de todo, su hermano algo de razon tenia...


(Continuara)

miércoles, 1 de julio de 2009

Meet the Habsburgs : "Broken Doll"


Ludwig observaba a su "pequeña" reposar en la cama mientras fumaba.

-No deberias hacerlo. Estas convalesciente.

-Esto me ayuda a superar el dolor, padre. Dios, que tedio volver!.

-Con que no volviste por Miana...

-Claro que no! Volvi porque ya no daba mas del dolor y el calor. No es muy comodo estar confinada a un balconcillo viendo como todos se divierten, menos una.

-Oh si. Conociendote , me lo imagino.- dijo burlesco

La muchacha sonrio y estiro la mano para levantar el visillo de la ventana y asi observar como el cielo azul, de a poco, se nublaba.

-Donde esta?

-Quien?

-Mimi...a mi no me haces tonto.

-No se,. quizas fue a buscar algo para comer...

-Que ni se le ocurra meterse en el cumpleaños. Que no conviertan la celebracion de Annunziata en un escandalo.

-Que va!. Si, le gustaria mostrarse, pero tiene sentido comun.

"JA! sentido comun, que saben estos niños de sentido comun!", pensaba el hombre riendo en su interior por lo caradura de su hija.

Esta tarareaba un vals y aspiraba fuerte el humo cerrando los ojos y dirigiendo una banda imaginaria.

-Al menos estuvo entretenido el viaje?

-Mi Bubi!!. Sabes que si!. Si tu has ido a Biarritz y sabes que alla se pasa genial.

Interrumpiendo a Ludwig el cual le iba a retar, entro al dormitorio Otto con un plato de torta en la mano.

-Tio Ludwig! que gusto volver a verlo!

-Como estas.- contesto algo molesto.- Bueno, los dejo a solas. Por favor, comportense.

-No te preocupes, papi, que lo haremos.

Les miro de mala gana y salio del dormitorio. La pareja quedo mirandose entre risas y Otto se tiro a la cama junto a su prima.

-Animal!! ten mas cuidado!

-Ay disculpe, su alteza!. Olvidaba que estas hecha de porcelana.

-Aun duele.

-Uf, supongo...- contesto haciendo muecas y sacandole bocado al pastel

-Aleja eso de mi.

-No te pongas quisquillosa!

-No me apetece. Que no entiendes?.- dijo tapandose la boca

-Esta bien....

Se paro lentamente dandose cuenta de su error. Se sento frente a ella y pregunto:

-Tio Bubi te interrogo?

-No, nada. Pero estoy segura que lo hubiese hecho si no hubieses llegado a tiempo

-Hmm...Yo siempre tan oportuno. Ouch!

-Que pasa!

-Me he...que diablos es esto?!

Se levanto y saco de detras suyo una preciosa muñeca de bisque algo rota. Sophie estiro los brazos pidiendosela

-Pasamela!

-Toma, aqui la tienes. Me enterre su piernita en la espalda.- farfullo sobandosela.- Deberias enseñarle a Miana a ser mas cuidadosa con sus cosas.

-No es de Miana...es mia.

-Uhh...juegas con muñecas, primita?.Pense que ya te habia enseñado a dejar aquellas niñerias atras.

No contesto. Quedo mirando la preciosa figurita , recordando su infancia, en especial el primer viaje a Francia, en donde conocio a Napoleon III.

1870. Tenia cinco años y ardia de ganas de conocer a aquel hombre al cual ella consideraba su padre. Se preguntaba como lucia en la actualidad, como olia, como hablaba, como le trataria., pues en cartas era muy amable y cariñoso. Por el habia aprendido a leer a los cuatro años, para ver en la privacidad de su cuarto las extensas misivas que le mandaba, sin depender de su madre o su hermano. Estaba completamente enamorada de la figura de aquel maduro hombre que posaba con toda parsimonia ante la camara.


Fue un tibio dia de Enero en el que desembarcaron, madre e hija en el puerto de Paris . Las esperaba un carruaje al cual la niña corrio emocionada pensando que su "padre" le esperaba ahi, pero solo encontro a Baccioci.

-Sean muy bienvenidas ambas.

-Muchas gracias, Felix.

-Y mi padre?.- pregunto decidida

-Mimi...

-Su...Padre la espera en casa.- acoto algo incomodo Felix

Solo asi la niña ingreso a la cabina y quedo tranquila sonriendo complacida. Al llegar, bajo apresuradamente y se avalanzo hacia la puerta. La sirvienta llego a dar respingo frente a la pequeña obstinada que corria hacia el salon. Fue ahi que le vio sentado con un gran caja en el regazo.

-Mon pere!!!.- chillo emocionada.

-Mimi!. preciosa...

Se avalanzo contra Napoleon y lo lleno de fuertes abrazos y besos. Carolath, la cual habia corrido tras ella, miraba algo turbada la alegria de su hija por aquel hombre que no era nada mas que su padrino.

-Carol...mon petite..

Se acerco al avenjentado emperador y lo saludo con un beso en la comisura de los labios.

-Como pasa el tiempo sobre ti, eh?

-Y tu pareces estar igual que aquel dia que nos conocimos.

Se sonrieron y luego Carolath dijo:

-Deja tranquilo al tio Napoleon, Sophie.

-El es mi padre. No se por que no lo aceptas.- respondio refunfuñando y agarrandose aun mas fuerte del hombre

-Amor, por que crees que soy tu padre?.

-Porque nos parecemos mucho. Mira, tengo tus ojitos, tu color...

-Pequeñita...que mas quisiese yo que fueses mi pequeña, pero, tu padre es Ludwig.

-Que no!!. Tio Bubi no lo es!. Lo quiero mucho pero es solo mi tio.

Los adultos se miraban confundidos y ella les miraba con seriedad.

-Da lo mismo.Aqui importa lo que yo piense y san se acabo!.- termino por decir con determinacion

Rieron y luego Napoleon entre suspiros, contesto :

-Como tu quieras, hermosa. Mira te tengo un regalito..

-Muestra ,muestra!!

La niña se sento a un lado y recibio el enorme presente. Rasgo los papeles, deshizo con sus deditos rapidamente las cintas y al levantar la tapa la vio ; Una hermosa muñequita de bisque con largos rizos rojizos y ojitos azules.

-Que preciosa!!. Me gusta mucho!!. Muchas gracias!

-La elegi pensando en ti. Sabia que la amarias.

La saco de la caja y la apreto contra ella.

-Se llamara "Bonni"!

-Y ese nombre?.- pregunto riendo Carolath

-Pues de Bonaparte!.- contesto guiñandole un ojito.

Como una familia pasaron el resto del dia. Salieron de picnic a disfrutar del dia, Mimi alimento los patitos con Napoleon, conversaron e incluso hicieron un intento de jugar criquet, el cual se vio interrumpido por la mala salud del emperador.

Al llegar a casa, Marie Sophie fue bañada, acostada en una tibia cama con sabanas de seda y bendecida por ambos.

-Sueña con los angelitos, amor.- dijo su madre.

Lla niña esbozo una sonrisa, recibio besos de ambos y cerro los ojitos, luego la pareja , rapidamente se escurrio hasta el dormitorio principal. A mitad de la noche , Sophie desperto agitada y desde donde se encontraba, oia sonidos distantes que provenian del fondo del pasillo. En puntitas, se paro de la cama y camino siguiendo aquellos ruidos que , a medida que se acercaba,mas fuerte se hacian. Al final del camino, una puerta semiabierta y una luz tenue que venia de ella. Sin hacer el menor ruido se acerco para ver y se topo con una imagen que la hizo sonreir de curiosidad y alegria , aun asi no entendiese bien de que trataba. Su madre, con el camison mostrando sus hombros, sentada a horcajadas sobre su "pere" Napoleon, se movia ondulantemente de arriba hacia abajo,. gimiendo y besando a su pareja apasionadamente.

Fue entonces que recordo lo que su primo Otto le habia contado tiempo atras...

-Yo se como llegan los bebes al mundo.

-Como vas a saber!. Ese es un secreto que se cuenta cuando uno esta grande.

-Yo lo se. Lo he visto. Papa se pone encima de mamà y...

-Calla! eso da risa!.

-Se mueven! bailan y se cansan. Mamà se cansa mucho mas que papà, porque gime y gime...

-Y como sabes que asi se hacen los bebès?

-Porque al tiempo despues, mamà quedo encinta y tuvo a Margerete!

-Ah con que eso era! un baile!

-Si pero shhst. No le digas a nadie que te conte...

-Lo juro.- dijo tocandose el lado izquierdo del pecho

Otto puso la mano sobre la manito de Mimi y sonrieron. Otto, su primo favorito...

Desde pequeños, de cuna, siempre existio una atraccion inminente y fuerte entre los dos. Jugaban animados, se contaban secretos, y de bebès, al separarseles, lloraban inconsolablemente. Habian nacido con solo un mes de diferencia y siempre andaban juntos. A veces, a sus respectivas madres les daba algo de morbo verlos tan juntos y mirandose a los ojos de una forma bastante extraña para dos infantes .

Por otra parte estaba el primo Franz Ferdinand, "Franzie", para Mimi, el cual siempre trataba de incorporarse a los juegos de Otto y Sophie, pero siempre era ignorado. Para la pequeña no habia mas que Otto y para Otto, cuando Sophie estaba frente suyo, no habia nada mas que ella.

En 1871, la tragedia cayo sobre los Habsburgo. Maria Annunziata, esposa de Karl Ludwig y madre de Otto y Franz fallecio de tuberculosis. Los niños entraron en shock y luego en confusion, al no entender bien lo que ocurria. Otto y Franz F pidieron expresamente quedarse con el tio Bubi y la tia Carolath por unos dias. Los recibio aquella noche Mimi la cual abrazo fuertemente a los dos y luego beso. Otto se aferraba a ella mientras Franzie le miraba turulato sobandose suavemente el lugar donde habia sido besado. Fue ese dia que se enveneno con el dulce veneno de Marie Sophie, y solo contaba con ocho años...

Los años siguientes, mas tragedias ; la muerte de la Abuela Sophie en 1872 y la muerte de su querido "pere", Napoleon en 1873. La noticia devasto a la pequeña y a su madre, las cuales le habian visto solo semanas antes del deceso, en Inglaterra. Ambas, junto a Ludwig, viajaron al sepelio en Inglaterra. En el se encontraron con Eugenie y su hijo, Napoleon Eugene, los cuales recibieron a ambas con felicidad. La imagen en el velatorio era extraña, extrañisima....Ahi estaban la Emperatriz, a su lado derecho , su hijo con la pequeña Mimi en el regazo y al lado izquierdo, una doliente Carolath que no paraba de llorar por su amor perdido.

-Calma, el ya descansa el paz.- decia Eugenie

-No puedo creer que se ha ido..

-Resignacion, amiga. Sabes? Las ultimas palabras que salieron de su boca fueron para ti...

-Que?

-Que fueron para ti. Que le habias hecho muy feliz.

La mujer hablaba con algo de amargura , pero llena de resignacion. Alguna vez habia reinado en el corazon del emperador, pero al morir, era Carolath la que llenaba su alma y pensamientos.

La joven estaba aun en shock por la muerte de su amado y arreglando las maletas para su vuelta a Austria cuando el cuarto se le hizo inmenso y borroso. Camino hacia la cama pero no alcanzo a llegar a ella. Al despertar, se vio acurrucada por su marido.

-No te ha hecho bien esto, no?

-No. Siento que parte de mi se ha ido a la tumba con el. Tantos recuerdos, tantos momentos juntos...

-Lo se. Son esas cosas las que debes atesorar.

-Y Mimi?

-Ella duerme. Le hemos dado agua de passiflora para calmarla un poco. No paraba de llorar.

-Pobrecita mi niña...

-Ella esta bien. Preocupemonos por ti. Desde hace algun tiempo te noto rara, palida...

-Si?

-Pues si....no sera que...

Le apreto mas fuerte y esta en su sopor recordo aquella noche, casi dos meses atras...

Estaban ambos arreglandose para dormir. Ludwig, con el ceño fruncido se calzaba el pijamas.

-Hace mucho frio esta noche.- se quejaba Ludwig.

-Pues entonces acuestate conmigo.

-No te molesta?.

-Y preguntas?. Para nada. Anda, ven.

Termino de arreglarse el pijama y se aproximo al lecho. Se acosto a una distancia prudente y tapo hasta las orejas.

-Tiemblas.- acoto riendo la joven.

-Es el frio!. Este lado esta congelado!

-Entonces acercate a mi.

El joven se acerco timidamente y llevado por el instinto, le abrazo la cintura.

-Mejor?

-Pues si...

Silencio. Ambos se observaban en el espejo que estaba frente a ellos algo nerviosos por el contacto tan "intimo" y cercano que estaban teniendo. El primero despues de mas de diez años de matrimonio.

-Bubi..- susurro

-Si?

-He estado pensando algo...

-Dime?.

-Quiero tener un hijo tuyo.

-Que?! Pero...pero tu sabes que yo no...

-Hombre! vamos! que no serias ni el primero ni el ultimo en engendrar teniendo "ese" problema...

-Caray....no se..

-Vamos...ahora es el tiempo preciso..

Insinuantemente y buscandolo comenzo a moverse contra el cuerpo del joven el cual temblaba. Tenia cerrado los ojos y los abria de momentos para observar el rostro de su mujer el cual estaba fijo en el espejo. Lo que sea que Carolath hubiese hecho dio resultado, y al instante estuvo listo para amar. Actuo lenta y timidamente, pues era la primera vez que tenia contacto con una mujer. Carol saltaba y ayudaba en el movimiento mientras el apegaba su pecho a la espalda de su mujer dejandose llevar por el vaiven. En cierto punto, las cosas se le fueron de las manos a Ludwig, el cual sin quererlo, comenzo a disfrutar el acto y a perder el control. Su esposa pronto le siguio y corriò mientras su marido le apretaba fuerte los pechos y este mismo caia disuelto en la mas increible de las sensaciones.

Agitados, se miraron sorprendidos en el espejo, rieron de buena gana y se besaron para luego terminar durmiendo abrazados, casi fundidos, aun asi el frio con aquella danza sensual, se hubiese disipado...



Carol, sorprendida recordaba aquella noche y miraba confundida a su marido el cual, lleno de esperanza, le observaba.

-Puede que si?. No cierto?

-Creo que...debemos preguntar al doctor...- dijo parandose bruscamente de la cama.

-Pero tu eres mujer. Has sido madre dos veces...ya debes intuir algo.- acoto su marido mientras le seguia.


Pues si lo intuia. Inconscientemente, durante el funeral, se aferraba del vientre, al igual que cuando se entero de la noticia de la muerte de Napoleon, el periodo no le llegaba y sus pechos dolian. Claro,era muy posible de que estuviese esperando aquel ansiado hijo. Ludwig apreto cariñosamente los brazos de Carol y beso su nuca, emocionado e ilusionado por la aun incierta noticia.

Esta fue confirmada al llegar a Austria, causando la impresion de los hermanos del joven, los cuales no creian aquello. El mas shockeado de todos era Franz, el que se sentia nuevamente traicionado por Bubi. Pero bueno, el ya se habia alejado en cierto modo emocional y pasionalmente de Carolath despues de que esta se enterase despues de la coronacion en 1868 de que Elisabeth esperaba un hijo. Aquella noticia fue como un balde de agua fria para la muchacha la cual puso cruz en la relacion de ambos.

La noticia de este nuevo bebe , junto al nuevo matrimonio de Karl Ludwig con la bella Maria Theresa Braganza y el de Gisela con el principe Leopoldo de Bavaria, traian nuevos brios a la entristecida familia que en menos de tres años habian perdido a la matriarca y a la esposa de uno de los hermanos. Ludwig no daba mas de orgullo y alegria. Por fin!, a pesar de todos los pronosticos, seria padre y dejaria descendencia propia en este mundo. Disfrutaba de las compras pre natales, agasajaba a Carol con regalos y le cumplia hasta el mas raro de los antojos. El kaiser veia esto de lejos y cabreado, al sentirse excluido y fatal al no se EL el padre de aquel vastago. Tenia envidia, mucha envidia, la que volcaba encerrandose en si mismo ey metiendose de pleno en el trabajo.

La alegria duro hasta agosto de 1873 cuando Carolath comenzo con los dolores de parto. Ludwig le acompañaba mientras el doctor atendia a la parturienta. El bebe solo tardo unos pujos en salir...

-Y , doctor?.- preguntaba ansioso el nuevo padre.

Este no respondia, estaba dedicado a estimular al bebe el cual estaba morado y no respondia a los movimientos. Ausculto el corazon del pequeño, le tomo el pulso y luego, toda la ilusion se hizo trizas : Habia nacido muerto.

El desesperado padre, tomo al bebe y trato de hacerlo reaccionar paro nada, no habia caso. El doctor le daba el pesame y explicaba las posibles razones de la muerte pero no escuchaba. El llanto de Carolath y el suyo lo tenian sordo. De testigo, detras de la puerta, Mimi observaba todo aferrada a "Bonni", no sabiendo que aquello marcaria el fin de sus dias de paz y el comienzo de una nueva etapa en su vida...la decadencia

-Fue bautizado post mortem como Ludwig Karl Viktor...

-De que hablas?.

-De mi hermanito...de aquel que nacio muerto el 73.

-Ah si..recuerdo. Que con el...?

-Le recordaba..- susurraba observando los azules ojos de su muñeca.

Otto dejo el plato de lado y se acerco a su prima. Le abrazo y recordo el dia del funeral. Ludwig y Carolath estaban inconsolables, a su lado los dos niños, Franz Ludwig de 12 y Marie Sophie de 8 , agarrados de la mano, seguidos por Otto el cual descansaba su rostro en el hombro de Mimi y Franz Ferdinand el cual permanecia con la vista perdida. Despues de ese dia, nada seria igual.

-El principio del fin...

-Mimi, no recuerdes mas aquello. Anda, piensa en el presente, en nuestro futuro.

-"Nuestro"?, lo tenemos?

Miro a Sophie directo a los ojos y luego le beso tiernamente. Fue entonces que Franz F irrumpio en la pieza agitado.

-Ustedes dos no se cansan de humillarme.

Dio un portazo y quedo semi deshecho apoyado a ella.

-Hermano...

-Franz, por que no te vas con Annunziata y...

-No...resolveremos esto hoy dia. Ya no aguanto mas!

-Te puedes calmar?. No me siento bien.

Furioso se acerco a su mujer y la levanto del brazo bajo la mirada atonita de Otto el cual, con algo de culpa, no sabia que hacer.

-Mientes, mientes!. Lo unico que sabes hacer es mentir!!.

La zamarreaba violentamente, tanto que Otto trato de detenerlo , pero solo consiguio ser empujado y botado al suelo. Marie Sophie sollozaba y pronto, el rosa del vuelo de su vestido se tiñio de rojo.

-Dios santo...- susurro horrorizado mientras Mimi caia abatida sobre la cama abrazandose el torso. Otto corrio a su lado y le tomo.

-Eres un imbecil. Ves por que te ha dejado?, por que te detesta?.- grito a su hermano

-Que le ocurre?...Mimi, amor, por favor, disculpame, disculpame!.- dijo acercandose a ella asustado y culpable

La joven estaba palida y tenia la mirada fija en el techo mientras su mente jugueteaba por los mas oscuros rincones de su memoria...

(Continuara...)