Llegaba un nuevo año, y con el, noticias inesperadas que pondrían a prueba nuestra relación de a tres. A principios de 1900, cuando me aprestaba a viajar a Paris junto a Lionel (John se nos uniría después) para probar en las Follies Bergere, me entere que estaba encinta. El primero en saberlo fue Lionel
-Un hijo...
-Si, un hijo, pero...
-No sabes de quien es...
-No...
Contrario a lo que yo pensé, me abrazo fuerte, acaricio mis cabellos y dijo:
-No importa, yo estaré contigo, siempre.
El que reacciono mal fue John.
-Que diablos Allegra!, Como fue a suceder?!
-Y preguntas como….- respondí sarcásticamente
-Y no sabes quien es el padre...
-Como habría de saberlo!, habrá que esperar que el niño nazca y ver el parecido.
-Ah Claro! el parecido...Te olvidas que Lionel y yo somos hermanos? ah!. De una forma u otra, ese bebé será un Blyth , por ende, tendra parecido a ambos!
Estaba desesperado y enrabiado, no solo conmigo, sino también con Lionel
-No debieses tratar así a Allegra , John. Tú fuiste tan culpable como ella y yo.
-No quiero hablar de eso
-Escúchame...
-No! y basta de tus sermoncitos de hermano mayor, estoy harto de ellos!. Me voy, vuelvo a Long Island y nos los quiero ver jamás!.
-Y si el hijo que ella espera es tuyo?.
-Haré lo correcto, lo reconoceré y ya.
-Le pediré matrimonio…
Con cara de espanto, John se volvió hacia su hermano y lo miro con ojos inyectados en sangre.
-Pues entonces que sean muy felices.
Y se fue para no volver en un buen tiempo. Al enterarse Mo de mi estado, me dio todo su apoyo y no me impuso un casamiento, que hubiese sido la salvación de mi reputación (se hablò mucho sobre mi embarazo fuera del matrimonio. Cuando Lionel caminaba conmigo por las calles de mi barrio, la gente cuchicheaba sobre nosotros y nos miraban mal. El ,molesto, los encaraba y decia : "Que? , acaso nunca han visto a una jovencita embarazada?. Preocupense de sus vidas y no de las de los demas!. Este es mi hijo y estoy muy orgulloso de el, al igual que de la madre!")
-Mi niña....eso te pasa por jugar juegos de adultos...Que dicen ellos sobre esto?
-Lionel, ya sabes, el estará conmigo y John, lo ha tomado mal. Se ha vuelto a Long Island y no quiere saber nada de nosotros.
-Y su familia...ya lo sabe?
-Ahh no...Ese es cuento aparte
Yo no temía tanto la reacción del padre, Maurice (el que era conocido por su vida licenciosa y llena de apasionados affaires), la que si temía era la reacción de
Y hasta qye llego el gran dia. Fue un parto difícil y doloroso. Gritaba, pataleaba y tiraba maldiciones por doquier, mientras Lionel trataba de consolarme.
-Calma Amor, ya saldrá, sigue pujando.
-No puedo Lionel, no puedo!!
-Vamos, ya nacerá nuestro hijo.
A las 3 de la mañana, la pequeña nació, gritando a todo pulmón y pataleando en el aire.
-Es una niña. Felicitaciones a ambos! .- dijo el doctor Miles padre
-Tenemos una hijita Allegra...mírala que linda!.- decía Lionel entre lagrimas
Yo también estaba feliz y emocionada al tener por fin a mi hija en brazos, pero eso no impedía que me sintiese apenada y perturbada ante la felicidad de el, mientras John, que podría tambièn ser el padre , andaba por ahí, haciendo quizás que. Al dejarnos un rato a solas y mientras yo descansaba alimentando a la pequeña, Lionel, mirándola dijo:
-Viste su mentón?
-Como no notarlo...sin lugar a dudas, una Blyth , aunque aun...
-No encontramos parecido ni a mí ni a John, pues ambos heredamos el mentón de nuestro padre... Eso se vera con el tiempo, no te preocupes. Allegra, tengo que decirte algo...
-Que pasa?
No fue necesario que lo dijese, al abrir la boca para responderme, Mo entro al cuarto y anuncio una visita.
-Allegra, mi amor, tienes visita.
Con un gran ramo de camelias, John entrò al cuarto con cara de perturbación y pena.
-Allegra...Lionel, felicitaciones.
-Ven John...mira, ve a la niña.- dijo Lionel con un fuerte toque de orgullo en sus palabras
-Una niña....a ver…
Se acercò a mi, corrió la frazadita que cubría su carita y la observo un buen rato, tratando de aguantar las lagrimas que evidentemente escapaban de sus ojos. Se sentìa culpable de haber reaccionado tan mal ante aquella noticia.
-Es...preciosa....preciosa...Allegra, discúlpame por haber sido un desgraciado contigo, yo no quise…
-John....John...ahora todo me da lo mismo. Comencemos de cero, todo de nuevo...vale?
Me apretó la mano y miro a su hermano sonriendo. Ambos fueron padres cariñosos para la pequeña Georgie. Al pasar el tiempo, cuando ella contaba con 3 meses, su abuelo Herbert vino a visitarnos. Siempre amable y galán conmigo, se sorprendio al ver a la niña despues de un par de meses que estuvo fuera en gira con su tropa actoral. Al verla dijo sorprendido y encantado:
-Vaya!, me marcho un tiempo y esta niña da el estiron. Es idéntica a Lionel cuando tenía esa edad. Sin duda alguna es hija de el. Ya No te quedan dudas, no cierto?
-Absolutamente ninguna Herbert!. Es cosa de mirar sus ojitos y sus gestos
(Cabello rubio,grandes ojos verdes penetrantes y rasgados, la boca pequeña y acorazonada y el mentón Blyth , así es Georgiana Drew)
-Y como esta Lionel?. No he alcanzado a verlo
-Encantado y enamorado de su niña. Esta tarde despues de las clases vendra a comer con nosotras. Te quedas tu tambien?
-Anotame querida. Tengo ganas de ver y hablar con mi hijo. Y John?
-En San Francisco. Vuelve mañana
El abuelo estaba embelesado con su nieta, la achuchaba, besaba y contemplaba con emoción
-Sabes que ella es mi primer nieto?. Y que nieta más bella me han dado ustedes, preciosa…
-Si, muy bella y despierta.
-Será actriz, yo lo se.
-Jajajaja el que hereda no hurta, no cierto?
-Exacto...a todo esto...que haras de tu vida despues?. Disculpa que pregunte tanto, pero me interesa el porvernir de la madre de mi nieta.
-Hmm, pretendo seguir en lo de Chapman algun tiempo y despues probar en las Follies Bergère
-Planeas irte a Francia?
-Si, pero en un par de meses mas
-Ah...Ally, te pido algo?. Podrias cantar algo para mi
-Si..ningun problema. Pero me diras para que?
-Primero canta y despues te digo.
-Hm....bueno.
Me senté al piano (cosa que aprendí gracias a Lionel) y entonè algunas melodías sueltas (y no subidas de tono como solía cantarlas en lo de Chapman) que recordaba de mi infancia. Al terminar, boquiabierto aplaudió con ganas.
-Mira que bien canta tu madre, Georgie!.Que preciosa voz tienes, en realidad no la recordaba. Eres justo lo que andaba buscando
-Como?
-Yo en estos instantes me encuentro buscando una actriz que me acompañe en algunas obras de vaudeville. No sabes como había buscado a una que cantase tan bello como tu. Aceptarías ser mi acompañante en las tablas?
-No se que decirte...yo...
-No te preocupes por nada, yo te contratarè una aya para la niña mientras actúas con la tropa y tendrás beneficios por ser madre. Que dices?
-Pero las audiciones...
-Deja eso de Paris para después, no podría soportar tener a esta belleza lejos mío, no quiero perder contacto con ella jamás. Di si, ya?
No pude negarme, fue tanta la amabilidad de Herbert que acepte encantada y feliz. La semana siguiente ya estábamos en los ensayos y los chicos se turnaban con
Fue entonces cuando me hice un nombre en las tablas gracias a mi "suegro" Herbert Blyth , mas conocido como Maurice Barrymore (el que por motivos de salud solo compartiò escenario conmigo algunas fechas) .
2 años duro la gira en diferentes obras y operettas, el nombre de Allegra Tassara se hacia conocido y reconocido en las altas esferas del circulo teatral. Mi vida profesional andaba sobre rieles, más no la personal. En 1902 tuve un acalorado y violento encuentro con Evelyn Nesbit por lo que había hecho con John. Era una noche en que ella iba saliendo de su actuación, la agarrè del brazo y la zamarreé sin piedad
-Eres una desgraciada!
-Y tu quien eres?.- respondió ella shockeada
-No te interesa quien soy...eres una tunanta desgraciada, como le hiciste aquello a John.
-John...que....
-Ahh! no te hagas la idiota!. Sabes algo, ni una perra mata a sus hijos de la forma en que lo hiciste tu...Inhumana, imbecil!
La empuje y botè al suelo mientras seguía mi ataque. Ella trataba de defenderse, pero mi poderío y furia Italiana la dejaban tan indefensa como pajarito recién nacido ante un halcón. Agarrándola de las solapas de su abrigo, le dije unas ultimas palabras que vendrían a ser profecía para ella.
-Tendrás una vida muy miserable, y cada cosa mala que pase en tu inútil y asquerosa existencia, será pago a la atrocidad que hiciste con ese hijo que cargabas en el vientre. Giuro!.
La deje llorando en silencio y al dar la media vuelta me encontré con el desgraciado que la auspiciaba, el vejete verde de Stanford White
-Y usted, pedofilo… Espero que tenga una muerte tan o mas terrible de la que tuvo ese indefenso ser.
(Palabras que tambien resultaron ser profeticas. Unos años despues, el celoso marido de la Nesbit, Harry Thaw, lo asesinò a sangre fria.)
Sali de ahi rapido dándole un empujón monumental a White . Fui paño de lágrimas del pobre John que se sentía consternado con lo que había ocurrido. Quería de verdad a aquella desgraciada y hasta le había propuesto matrimonio, como lo había hecho conmigo después del nacimiento de Georgie, al igual que Lionel. Al tiempo después se recuperò y volvió a las andanzas. Ahora el golpe vendría de otro lado....
Lionel había conocido a una actriz llamada Doris y a fines de 1902, después de sucesivas negativas mías ante sus peticiones de matrimonio, se comprometió con ella, efectuándose el casamiento en 1903.
-No te perderé nunca, no cierto?
-No, nunca...estoy feliz por ti. Se nota que Doris es una buena mujer y ella te hará feliz.
-Tu también me has hecho feliz...desde que nos conocimos, me diste una hija y...
-Pero no seria buena esposa. Ella si lo será, yo siempre estaré aquí, Georgia y yo.
-Amor mìo...
Esa noche fue la última vez que hiciésemos el amor en meses. Fue difícil la separación en la mañana, no porque no lo fuese a ver mas, de ningún modo, seguiría visitándonos todos los fines de semana, sino porque ahora el seria un hombre comprometido y por respeto a su mujer, limitaría nuestros encuentros a meras visitas de padre a hija.
El día del matrimonio no salí de casa, me quede observando a nuestra hija mientras jugaba a las muñecas. De inesperado, tocaron el timbre
-John....te hacia en la ceremonia.
-No, no andaba de ganas de tonterías y ritos idiotas. Prefería estar con ustedes.
Vio mi mirada triste y abrazándome fuerte dijo:
-A mi no me has perdido. Siempre nos perteneceremos el uno al otro
Con un beso suave, de esos que nunca me había dado, entramos abrazados a la casa para seguir observando a la niña jugar feliz de la vida mientras cantaba una canción de cuna abrazando a su muñequita.
Fin capitulo III
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